El Círculo de la Sanidad alerta de los riesgos de “dejar pasar la oportunidad que ofrecen los fondos europeos para proteger la sanidad"

·       Para la entidad, estos fondos suponen una oportunidad imprescindible para renovar, actualizar, reforzar y mejorar la capacidad del Sistema Nacional de Salud (SNS), fuertemente dañado tras los dos años de pandemia de COVID-19

·       Entre el total de las partidas que se pueden destinar a Sanidad, se podrían liberar cerca de 400 millones de euros, una cantidad de la que el 70% debe estar ya comprometida antes de finales de 2022

El Círculo de la Sanidad ha alertado del peligro que supone para el Sistema Nacional de Salud (SNS) “dejar pasar la oportunidad que ofrecen los fondos públicos” como herramienta para mantener el derecho de los ciudadanos al acceso a la Sanidad”.

Así lo ha manifestado el presidente del Círculo de la Sanidad, Ángel Puente, en relación a la llegada de los fondos europeos Next Generation y, en concreto, al 16% del total de partidas que se pueden destinar a mejorar la sanidad en distintos planos, entre los que destacan el tecnológico, el digital y la prevención y promoción de la salud, entre otros. Para Puente, se trata de un porcentaje “claramente insuficiente para apuntalar uno de los pilares básicos del estado de bienestar, pero no por ello prescindible”.

Y es que, a su juicio, “estos fondos suponen una oportunidad más que necesaria para reforzar nuestra capacidad como SNS, para renovar, actualizar y mejorar el sistema en aras de continuar siendo punteros y manteniendo una de las mejores sanidades de Europa”. En concreto, entre las distintas partidas que ofrecen los fondos, para Sanidad se pueden aprovechar cerca de 400 millones de euros, de los que el 70% tienen que estar comprometidos antes de diciembre de 2022.

Sin embargo, esta provisión de fondos por parte de la Unión Europea, que llega como respuesta a las consecuencias de la COVID-19, trae un condicionante temporal y económico al que se debe dar respuesta para poder beneficiarse de estos recursos. Entre ellas, unos plazos exigentes de presentación de proyectos y ejecución de los mismos, que sitúan en 2026 el límite para realizar el desembolso y en 2058 el plazo rembolsable y que establecen un límite temporal de presentación de proyectos mucho más limitado.

“En ocho meses hay que preparar el proyecto, presentarlo y, de ser aprobado, ejecutarlo. Son unos plazos muy ajustados que debemos hacer un esfuerzo por cumplir, pues en la situación actual en la que nos encontramos y en la que está la sanidad, no podemos permitirnos perder esta oportunidad que nace como consecuencia de la desgracia de la pandemia y que es una herramienta imprescindible para recuperar nuestra sanidad”, ha explicado Puente.

En este sentido, ha recordado que, si bien el SNS ha demostrado ser fuerte, resiliente y capaz de sobreponerse de la pandemia, “ha sido el esfuerzo conjunto, de los ciudadanos, la administración, lo público y lo privado, lo que ha permitido seguir dando un servicio óptimo durante estos años”. Por este motivo, para la entidad es fundamental trabajar en proyectos colaborativos que fomenten la colaboración público-privada para afrontar el reto de actualizar y modernizar la sanidad.

“Ocuparse del progreso de la sanidad es proteger el derecho de todos los ciudadanos a su acceso y garantizar la continuidad del principal pilar del Estado de Bienestar y es labor de todos fortalecerlo. Es absolutamente necesario poner en valor nuestras necesidades y posturas, asumir que estamos en el mismo barco y que si no remamos hacia la misma dirección no lograremos nuestro objetivo.”, ha aseverado Puente.